miércoles, 27 de febrero de 2019

EL LARIMAR, ORGULLOSAMENTE BARAHONERO

                                      

EL LARIMAR ES UNA PIEDRA SEMIPRECIOSA DE COLOR AZUL TURQUESA ÚNICA EN EL MUNDO, SE ENCUENTRA SOLO EN LA ZONA DE BAHORUCO, POBLADO ENCLAVADO EN LAS HERMOSAS COSTAS CARIBEÑAS DE BARAHONA, REPÚBLICA DOMINICANA.


LAS JOYAS DE LARIMAR AHORA ESTÁN DISPONIBLES EN LA “TIENDA-MUSEO DE LA ESCUELA DE ARTESANÍA DEL LARIMAR”, UBICADA EN LA CIÉNAGA, CARRETERA DE ENRIQUILLO, MUNICIPIO DE BAHORUCO, BARAHONA, REPÚBLICA DOMINICANA. Información: teléfono 829-470-6523.



La mayoría de las joyas producidas en los talleres de la escuela unen el larimar con plata, aunque en ocasiones las piedras se unen a oro. Se evalúa la calidad de la piedra según su coloración: cuanto más profundo el azul de la piedra, más estimada es la pieza de Larimar. Las joyas de alta calidad utilizan piedras entre el azul cielo y el azul profundo, muchas veces uniendo estas dos tonalidades para conseguir unos matices únicos y que solo se asemejan al color de las aguas del mar Caribe que bañan las costas de Barahona.



Breve historia del Larimar:
En 1916 el sacerdote Miguel Domingo Fuertes de Loren, quien en ese entonces era párroco de Barahona, fue el primero en descubrir la roca azul. El 22 de noviembre del mismo año, solicitó un permiso para explorar y explotar la mina, pero éste fue rechazado ya que en el país no se conocía este tipo de pectolita.
Entonces fue solamente en 1974, al pie de las montañas de Bahoruco, en la provincia costera de Barahona, que una piedra azul en la playa atrajo la atención de Miguel Méndez y del voluntario del Cuerpo de Paz Norman Rilling, redescubriendo el Larimar. Los habitantes de la zona que pensaban que esta roca provenía del mar, la llamaron Piedra Azul. Sin embargo, su nombre actual se lo debemos a Méndez, quien al unir el nombre de su hija, llamada Larissa, y la palabra mar, por los colores del agua del Mar Caribe donde fue encontrada, formó la palabra Lari-Mar. Las pocas rocas que encontraron eran restos que habían sido arrastrados hasta el mar por el Río Bahoruco. Luego de una extensa búsqueda, se encontró el origen de las rocas, que se convirtió en la mina Los Chupaderos. Este lugar es el mismo que había encontrado el sacerdote en 1916.

Investigaciones revelaron que la mina de Los Chupaderos constituía la única mina de larimar conocida en el mundo y el larimar se clasificó en 1979 como piedra semipreciosa.